Yo Construyo
Experimentado prevencionista: “Los jóvenes son más rebeldes con lo que es la seguridad”
Autor: Ivan Urbina, publicado el
Aron Azócar lleva 12 años trabajando como prevencionista de riesgos en el rubro de la construcción. Aseguró que, en su experiencia, es más difícil educar a los jóvenes en materia de seguridad que a los maestros con más rodaje.
Según el Informe Anual de Seguridad y Salud en el Trabajo de 2021, de un total de 135.715, casi 4 de ellos tuvieron accidentes en el rubro de la construcción el pasado año.
El estudio realizado por la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO) indicó, además, que por cada 100 mil trabajadores, hubo 5,1 con accidentes fatales en la construcción.
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A pesar de que la tasa de accidentes en la construcción durante las últimas décadas ha ido a la baja, sigue siendo un rubro peligroso, y la labor de los prevencionistas de riesgo se vuelve cada vez más fundamental.
Por ello, día a día Aron Azócar (40) llega con todo el ánimo a la obra del Condominio Vitalis en San Miguel. Él sabe que su trabajo es indispensable para el funcionamiento de la obra, sobre todo sabiendo que no es fácil educar y capacitar a todos los trabajadores en la prevención de riesgos.
“La verdad es que cambiar la mentalidad de los trabajadores es lo más complicado, inculcar la cultura de la seguridad en sus actos. Uno siempre trabaja con la misma gente prácticamente, uno va conociendo a los viejitos y les va inculcando la cultura de la seguridad”, relató el prevencionista a La Cuarta Constructor.
En sus 12 años de experiencia cuidando y enseñando a trabajadores del rubro de la construcción, Aron ha llegado a una conclusión: los jóvenes son siempre más osados y más porfiados a la hora de seguir los protocolos de seguridad.
“La gente mayor es más tranquila. Hoy en día los jóvenes son más rebeldes y osados con lo que es la seguridad. La gente mayor trabaja y uno ya cómo ha trabajado con ellos les da las directrices y ya saben la manera correcta de hacer sus labores”, explicó.
Ejemplificó señalando que “una vez vi a un trabajador que se estaba subiendo a una trepa. Él sabe que tiene que seguir un protocolo, ponerse el arnés, anclar la cuerda de vida, pero este joven no, sabe que tiene que hacerlo pero no se engancha, es más porfiado”.
“En cambio la persona de edad sabe, tiene la experiencia de haber visto accidentes graves en distintas etapas de la construcción. El cabro joven no, porque piensa que no va a suceder, o quizás no ha sido testigo de algún accidente”, agregó.
Por ello, aconsejó a quienes lleven poco tiempo trabajando en la construcción que siempre sigan los consejos de sus pares mayores, o bien de los profesionales prevencionistas, que siempre van a velar por la seguridad y por seguir los protocolos dispuestos en la obra.
“Los prevencionistas tenemos un sistema. Si el trabajador no nos hace caso en algún tema de seguridad, tenemos que hacer contacto personal y amonestar, y ver el por qué esa persona no quiere seguir los protocolos y reglas, y posteriormente instruir y reconstruir a ese trabajador”, aseguró Azócar.
Al finalizar, el profesional declaró que la mala acción que más se repite en temas de seguridad tiene que ver con el no uso, o uso indebido, de Elementos de Protección Personal (EPP).
“Por ejemplo, ahora es muy común el no uso de gafas por el tema de la mascarilla, del momento que salió el tema del covid. Eso es algo que tenemos que cambiar, porque el peligro está siempre presente”, sentenció.