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Yeso: Un legendario material utilizado desde la mismísima Edad de Piedra
Autor: Constructor, publicado el
En la actualidad, la principal virtud de este insumo es otorgar terminaciones lisas y perfectas en muros y cielos.
Uno de los primeros materiales que se ocuparon para construir fue el yeso. De hecho, sus comienzos se remontan al Neolítico, época en que se utilizaba este insumo para unir piezas de mampostería. Así dan cuenta los primeros frescos encontrados en Anatolia, los cuales se pintaron sobre una superficie de yeso.
Además, las imponentes construcciones del antiguo Egipto poseen yeso en los sellados de la gran pirámide de Guiza. También en las tumbas, donde se utilizó este material como revestimiento y soporte de bajorrelieves pintados.
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En Chile, este material aún se utiliza en la mayoría de las obras, a pesar de que sus usos se remontan al año 1916.
En esos tiempos, su utilización “provocó un gran interés por las ventajas en términos de eficiencia y optimización de costos: entrega mayor avance, no genera escombros, se necesita de menos mano de obra y se acortan los tiempos de trabajo”, aseguró Alejandro Violic, , subgerente de Productividad Aplicada de Volcán.
¿Por qué utilizar yeso?
Emparejar, suavizar y subsanar las porosidades son las razones de por qué se utiliza el yeso en muros y cielos. De hecho, su aplicación es fundamental en el proceso de terminaciones, puesto que prepararemos la superficie para el revestimiento con papel mural o pintura.
El proceso tiene tres etapas: en la primera se utiliza un promotor de adherencia, un material líquido con sólidos en suspensión aplicado mediante rodillo, lo que aumenta la superficie de contacto del muro y asegura un óptimo anclaje del yeso. “Su correcta aplicación evita el desprendimiento, por ejemplo, en casos de sismos”, dijo Violic.
En una segunda etapa viene el yeso, que se puede instalar de forma manual o proyectado con máquina.
Hay diferentes productos en la línea manual. De por sí, existe uno express, el cual seca en 25 minutos y es ideal para obras pequeñas. Existen también los de fraguado controlado, de 50 minutos, sugeridos para tareas de mayor envergadura.
Una vez instalado el yeso, se utiliza una innovadora pasta de terminación, la cual logra un mejor blanco de fondo. Esto deja las superficies listas para recibir pintura o revestimiento mural, aportando una terminación perfecta en los muros.