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Si necesitas renovar tu calefont, pon atención a esta guía definitiva para la compra

Autor: Ivan Urbina, publicado el

Con la llegada del invierno, es fundamental tener un calefont funcional para disfrutar de duchas reconfortantes. En esta nota, revisa todo lo que necesitas saber para elegir el calefont perfecto que se adapte a tus necesidades.

Poco a poco se acerca el invierno y, a pesar que aún no ha llegado como tal, las bajas temperaturas invitan a ducharse con agua bien caliente. Y, para ello, necesitas tener un calefont funcional. 

El calefont es un sistema de calentamiento de agua instantáneo cuya función es aumentar su temperatura en el momento en que se utiliza. Este aparato gestiona gas, agua y fuego. Tiene una entrada de agua fría, una entrada de gas y una salida de agua caliente, además de funcionar con un sistema de encendido que permite que se caliente el agua dentro del dispositivo.

A este aparato se le debe realizar mantención, la cual debe hacerse al menos una vez por año. Así lo aseguró Emilio Guerra, profesor del Departamento de Construcción y Prevención de Riesgos de la USM, quien indicó que “los principales componentes a revisar son la membrana de presión que regula el flujo de agua, sensor de temperatura, válvula solenoide, platillo, microswitch y estabilizador de caudal. Esta mantención, si bien no es difícil de realizar, siempre es recomendable que sea realizada por un técnico especialista y con licencia vigente SEC”. 

Expertos recomiendan cambiar el calefont, por lo menos, cada 10 años. “Cuando se opta por cambiar el artefacto son varias los factores que pueden influir, como, por ejemplo, la pérdida de eficiencia, ampliaciones con nuevos puntos de agua caliente, posibles fugas, cambio de piezas que tienen un precio elevado, obsolescencia tecnológica, problemas de seguridad”, añadió el experto. 

Si llegó la hora de decir adiós a tu calefont, en esta guía te ayudamos a elegir la mejor opción que se adapte a tus necesidades. 

Antes de realizar la compra, es esencial que tengas en cuenta varios aspectos fundamentales que aseguren que tu elección sea la más adecuada. Entre lo que hay que prestar atención están los siguientes aspectos:

Tipo de gas

Según Emilio Guerra, lo primero a tener en cuenta al momento de renovar el calefont es saber qué tipo de gas se utilizará: si es licuado o natural.

El gas natural proviene de tuberías, mientras que el licuado se almacena en cilindros. Es crucial usar el tipo correcto para evitar daños.

Capacidad en litros 

Comúnmente, podemos encontrar diversas opciones en el mercado, las que van desde los 5 hasta los 32 litros inclusive. Para decidirse, es importante considerar la cantidad de grifos de agua caliente en casa: lavaplatos, lavamanos, duchas, etc.

“Por ejemplo, un calefont de 5 litros puede dar servicio a un lavaplatos o un lavamanos pero para una ducha su capacidad de calentar se ve disminuida ya que el consumo de una ducha promedio es de 7,5 l/min. Si se quiere al mismo tiempo tener agua caliente en un lavamanos o lavaplatos y la ducha será necesario al menos un calefont de 10 litros. Con un calefont de 14 litros ya se pueden comenzar a surtir 3 puntos”, explicó el docente de USM.

“Otro aspecto para considerar es la distancia desde el calefont hasta los puntos de salida de agua caliente ya que a mayor distancia menor es la temperatura de salida debido a la pérdida de energía que se produce en el trayecto”, añadió. 

¿Tiro forzado o natural? 

Otra de las características técnicas comunes de ver al momento de adquirir un calefont es el tipo de tiro: si es forzado o natural. 

Tiro natural. “El tiro, técnicamente, es el movimiento del aire y los gases de combustión que se producen al interior del calefón y que se deben eliminar hacia el exterior. Gracias a la diferencia de presión y temperatura, en el tiro natural los gases calientes emanados de la combustión suben a través del tubo de salida, ya que son menos densos que el aire exterior, evacuándolos fuera del recinto, idealmente por la techumbre. Una desventaja es que la salida esté muchos metros más arriba que el calefont, lo suficiente como para que los gases no alcancen a salir e incluso se acumulen en la tubería y se devuelvan, siendo detectados por los sensores del calefont, haciendo que este se apague o simplemente no prenda”, aclaró Guerra. 

Tiro forzado. “El tiro forzado utiliza un ventilador dentro del artefacto para impulsar los gases de combustión hacia el exterior, siguiendo la misma lógica que la evacuación natural. Es común elegir este tipo de extracción cuando el diseño del espacio donde va a estar instalado el calefont no permite una extracción segura hacia el exterior, por ejemplo, en los departamentos o simplemente se quiere garantizar una evacuación segura de estos gases”, explicó el académico. 

Conclusiones

Renovar el calefont puede ser una decisión importante para garantizar el confort y la seguridad en tu casa. Al considerar aspectos como el tipo de gas, capacidad en litros y el tipo de tiro, puedes estar seguro de hacer la elección correcta. 

Eso sí, siempre es importante preguntar a profesionales. Procura también que la instalación sea efectuada por un gasfiter certificado por SEC.