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Calefacción por suelo radiante: ¿Cómo funciona este novedoso método para obtener calor desde el piso?

Autor: Ivan Urbina, publicado el

El frío invernal se combate con soluciones efectivas e innovadoras. La calefacción por suelo radiante es una de ellas: cuenta con diversas ventajas en eficiencia energética, además de ser amigable con el medioambiente.

Una de las soluciones más innovadoras para encarar el frío del invierno es la instalación de calefacción por suelo radiante. Este sistema consiste en la instalación de tuberías o cableado bajo el suelo, a través de los cuales circula agua caliente o electricidad para generar calor de manera uniforme en un espacio.

“La calefacción por suelo radiante consiste en pasar calor por el piso, lo que se puede hacer entregando calor por agua caliente calentada por una caldera, la que se transporta por cañerías por el suelo”, explicó José Ignacio Torres, director de la Escuela Construcción de Universidad de Las Américas (UDLA).

“Otro método menos convencional es un piso radiante eléctrico, en el que van cables enterrados en el radier. Con este sistema, se hacen pasar unos 100 Watt por cada m2, lo que provoca que se calienten los cables”, aseguró el académico. 

Al distribuir el calor desde el suelo, se elimina la necesidad de utilizar radiadores o conductos de aire caliente, lo que evita los puntos fríos y reduce las pérdidas de calor que suelen ocurrir con otros sistemas de calefacción.

A pesar de no ser un sistema de calefacción muy común, cada vez son más las viviendas y edificaciones que incorporan el suelo radiante, sobre todo pensando en sus múltiples beneficios a largo plazo. 

Beneficios de la calefacción por suelo radiante

Algunas de las ventajas de la utilización de este sistema es que, por ejemplo, ofrece mayor eficiencia energética, confort térmico y es más amigable con el medioambiente que otros sistemas más tradicionales.

“La principal ventaja es la eficiencia espacial en la aplicación del calor. En palabras simples, como usuario puedo decidir qué sectores específicos prender en la vivienda o el inmueble, lo que genera una demanda más controlada. Es decir, solo gasto justo lo que necesito”, señaló Torres.

“Otra de las ventajas es que, con el suelo radiante, se puede entregar el calor en forma más efectiva, justo donde el usuario lo necesita, logrando un mayor confort térmico, O sea, se puede tener la tranquilidad de estar solo con polera y con los pies siempre calentitos en pleno invierno, lo que ayuda también en la comodidad”, agregó el docente de UDLA.

Su compatibilidad con fuentes de energía renovables es otra virtud a destacar. Al aprovechar fuentes de energía más limpias y sostenibles, la calefacción por suelo radiante contribuye a la reducción de las emisiones de carbono y al cuidado del medioambiente.

Estas razones provocan que la calefacción por suelo radiante sea una alternativa que promete masificarse en un futuro cercano, en especial por ser una fuente de energía renovable, cómoda y eficiente.