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Sepa por qué los pisos vinílicos la están rompiendo como recubrimiento

Autor: Constructor, publicado el

Este tipo de revestimiento tiene un aspecto de madera, piedra o cerámica, pero es fabricado en base a PVC. Tiene propiedades térmicas, acústicas y antibacterianas, y duran hasta 30 años.

Un sistema que está revolucionando la industria de revestimientos son los pisos vinílicos. Estos consisten en palmetas fabricadas con PVC como material base, pero que simulan perfectamente otros materiales como madera o cerámica, sin dejar de lado las virtudes constructivas del plástico, es decir, son una opción durable, duradera y con cualidades térmicas, acústicas, antiestáticas y antibacterianas. 

“Estos pavimentos plásticos poseen alta resistencia a la humedad y al desgaste propio por su utilización o uso. Como este sistema se vende en formatos de rollo o palmeta, presenta ventajas en cuanto a sus múltiples formas de ser dispuesto en un recinto. Además, es posible de encontrar en variadas texturas simuladas a partir de las impresiones propias de estos sistemas y es fácil de instalar y limpiar”, señaló Jaime Arriagada, ingeniero, arquitecto y académico de la Escuela de Ingeniería de la Universidad Central.

Por estas razones es que los pisos vinílicos van ganando más terreno en el mundo de la construcción y el inmobiliario. Eso sí, también hay que tener ciertos cuidados al instalar este tipo de revestimiento, ya que es recomendable que no sea ubicado en lugares donde haya un tránsito excesivo, porque pueden rasgarse o pelarse con el tiempo. 

Ojo, que si están bien instalados, podrían durar hasta 20 o 30 años sin la necesidad de cambiarlos ni hacerles mantención.

 

En la práctica

Se dice que los pisos vinílicos son los más jóvenes si de revestimientos de suelo se trata, ya que reúnen las características de todos los demás. 

Para su instalación, es de suma importancia que “la habitación sea firme y no tenga posibilidades de que se generen deformaciones o fisuras. Frente a eso, se recomienda que esta pieza sea hormigón armado, en el caso de un edificio, o radier, para el caso de una vivienda”, explicó Arriagada. 

Luego de esto, debemos tener en cuenta que “la superficie debe estar absolutamente lisa, nivelada y limpia, a la que se le puede colocar un nivelador de piso en caso de ser necesario. Luego, las palmetas se colocan desde el centro al perímetro, incorporando pegamento vinílico en el piso mediante una llana dentada. En caso de ser requeridas unidades de distintos tamaños, las palmetas se pueden cortar fácilmente para que se adapten”, agregó el experto.

Es importante mencionar que la temperatura y la humedad del lugar deben ser controlados para que el adhesivo realice su función de forma adecuada, es decir, que no haga mucho frío ni mucho calor en el ambiente.