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Ponga ojo a las dosificaciones de los materiales al fabricar un radier

Autor: Ivan Urbina, publicado el

Es importante conocer las cargas que tendrá esta superficie para saber cuánta arena, gravilla, cemento y agua debemos aplicar en la mezcla. 

Un radier es una base firme fabricada a través de hormigón y otros insumos. Es uno de los primeros pasos para la construcción de una edificación, y es la base para pavimentos posteriores.

“El radier es un pavimento para el interior y exterior de una vivienda en base a hormigón. Dependiendo del uso y la ubicación se considera un revestimiento sobre el radier, desde afinado de hormigón, cerámicos, porcelanatos, pisos flotantes, alfombras, entre otras opciones”, aseguró José Ignacio Torres, director de la Escuela de Construcción de Universidad de Las Américas (UDLA).

“El radier es una medida estándar en la combinación del cemento, áridos (arena y gravilla) y agua que necesita”, agregó el académico.

Dependiendo de las cargas que tendrá que soportar, las dosificaciones para preparar el concreto para un radier deberán variar. Es decir, si solamente soportará el peso de personas caminando, o deberá aguantar el peso de autos, camiones, etc. 

“Lo mejor si es que no sabe las proporciones es que compre sacos con mezcla lista. En el mismo saco dice para cuantos m2 alcanza y uno calcula cuántos saco considera. Por lo general el espesor de un radier está entre los 5 y 7 cm”, explicó Torres.

Sin embargo, la dosificación de un radier promedio es, por cada m3, 6-7 sacos de cemento, 1m3 de gravilla, 1/2m3 de arena y 20-25 litros de agua.

Proceso para la construcción de un radier

Si bien el proceso para el armado de un radier es un tanto complejo, siguiendo los pasos al pie de la letra será pan comido.

1. Medir y preparar el terreno. Luego de determinar el perímetro en el cual estará el radier, debemos realizar una excavación. 

2. Delimitar el perímetro. Aseguramos el perímetro con estacas, formando una delimitación. 

3. Aplicar gravilla. Aplicamos una capa de gravilla, y luego se procede a la nivelación y generación de pendientes.

4. Fabricar moldaje. Se realiza el moldaje del radier, para que quede completamente proporcionado una vez que se aplique el hormigón. En este moldaje se pueden marcar las cotas superiores que debe de alcanzar el hormigón en el radier, con sus pendientes correspondientes.

5. Ubicar malla. Se ubica una malla acma en toda la superficie del radier. Esto ayudará a repartir las cargas de manera uniforme y otorgar más resistencia al radier. Ojo: dependiendo del uso que se le vaya a dar al radier, la malla se colocará simple o doble.

6. Agregar mezcla. Se agrega el hormigón sobre la malla. Es de suma importancia que quede completamente nivelado.

7. Curar el hormigón. Es importante que, una vez terminado y seco el radier, se vuelva a aplicar agua de forma periódica. Este proceso de curado evitará que se vaya perdiendo la calidad del hormigón al pasar el tiempo.