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Lo último en tabiques: opciones que resisten a todo y son amigables con el medioambiente

Autor: Ivan Urbina, publicado el

El uso de los tabiques en la construcción va adquiriendo cada vez más tecnología, lo que significa mayor versatilidad en la separación de ambientes.

Una de las maneras más rápidas y efectivas para separar ambientes es la tabiquería, es decir, la construcción de un muro no estructural. Se habla de muro no estructural ya que estas son paredes que no tienen la responsabilidad de aguantar fuerzas que actúen sobre ellas.

“En cualquier caso, los tabiques, para cumplir adecuadamente su función deben ser capaces de aislar de la humedad, aislar térmica y acústicamente, así como tener resistencia adecuada a la acción del fuego para contener eventuales incendios y tener resistencias mecánicas mínimas para garantizar su durabilidad”, explicó Pablo Alcaíno, profesor de Ingeniería Civil en Obras Civiles de la UCEN.

En general, los tabiques se construyen a través de un esqueleto formado por perfiles de madera o metal, los cuáles se revisten por planchas no estructurales como OSB o yeso cartón. Aunque también está la tabiquería de ladrillos o bloques de hormigón.

“Lo más usual es clasificar los tabiques por la materialidad de su esqueleto. Los más comunes son tabiques de albañilería de ladrillos, de bloques de concreto o de hormigón celular; tabiques de madera revestidos con planchas de OSB, terciado, yeso-cartón, fibrocemento, entre otros materiales; tabiques de acero zincado (galvanizado) revestidos con planchas de OSB, terciado, yeso-cartón, fibrocemento, entre otros materiales”, aseguró el experto.

Agregó que “en las últimas décadas han surgido otras materialidades para tabiquería como los paneles tipo sándwich: planchas con poliestireno expandido (nombre genérico del conocido Plumavit) en el centro”.

Las novedades del mercado

Todos los años aparecen más y más productos de tabiquería que ayudan a mejorar ciertas características que buscan los maestros y dueños de casa con las separaciones de ambientes. Por ejemplo, aumentando su capacidad térmica y acústica, o hasta realizando planchas yeso cartón u OSB ideales para revestir exteriores.

“Prácticamente todos los años aparecen nuevos productos en el mercado en los que en base a mejoras en las características de los materiales o su forma geométrica se disminuye su huella de carbono, se hacen más amigables con el medio ambiente (por ejemplo eliminando el asbesto de las materias primas), mejoran los desempeños térmicos, acústicos, de resistencia al fuego o estructurales de estos tabiques”, señaló Alcaíno.

“Si se desea adquirir tabiques listos para instalar, para hacer la mejor elección y realizar la inversión con tranquilidad siempre hay que fijarse en los niveles de certificación que tengan los productos: para un tabique comercial, estos deben cumplir con una serie de normas chilenas, entre ellas las NCh 801, 802, 803, 804, 805 y 806, a través de las cuales las propiedades del tabique se certifican mediante ensayos en laboratorios especializados”, cerró.