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¿Cómo ha afectado la tecnología a la construcción durante la última década?

Autor: Constructor, publicado el

Sergio Olmos Vásquez, docente de Duoc UC, sede Maipú, explica en esta columna cómo algunos procesos se han ido automatizando y digitalizando en el último tiempo.

La industria de la construcción tiene una importancia fundamental en el desarrollo económico de nuestro país, con cerca del 7,2% del Producto Interno Bruto (PIB), aportando al empleo un 10,6% de la fuerza laboral. Pero este gran aporte que realiza la construcción no se refleja en la productividad laboral si la comparamos con otras industrias, pues es 35,5% menor a la que tiene toda la economía. Las causas que afectan esta baja productividad laboral son varias y una de ellas es la baja adopción de métodos avanzados de gestión de la información.

El uso de la tecnología en la industria de la construcción no ha tenido un desarrollo tan rápido como otras actividades. No obstante, se han desarrollado algunas innovaciones en algunas áreas, como el desarrollo de diversos software para diseños o dispositivos móviles. Los teléfonos inteligentes y sus aplicaciones impactan en la construcción de obras gracias a su facilidad para comunicarse, transmitir fotografías, videos e información geo-referenciada de forma fácil, instantánea y con costo marginal, fenómeno que ha revolucionado los procesos.

A nivel mundial, se están usando cada vez más los drones para planear y coordinar el uso de maquinaria pesada, equipada con dispositivos de geolocalización que ayudan a la planeación, control y eficacia de las obras.

También la supervisión y control de obras se han ido transformando gracias a la tecnología, permitiendo la gestión y la toma de decisiones oportunas con sistemas basados en información ejecutiva que se mantienen vía internet en bases de datos remotas (la nube), y permiten manejar cientos de obras si se requiere, generando información agregada y resumida, o tan detallada como se desee.

No obstante lo anterior, la baja digitalización en la construcción respecto de otras áreas de la economía está muy por debajo y ha llevado a la Corfo (Construye 2025) a adoptar un plan a nivel de país para una transformación digital tanto en las empresas públicas y privadas para mejorar la productividad de la Industria de la Construcción.

Es así como una de las tecnologías que más ha impactado a nivel mundial (Reino Unido, USA y Australia) en años recientes en la construcción es BIM (Building Information Modeling), que permite el diseño, construcción y operación de edificación o infraestructura de manera mucho más eficiente, rápida y con un menor costo. Se basa en el establecimiento de un modelo matemático computarizado detallado de la obra a construir, incluyendo sus dimensiones físicas (3) más tiempo y costo (5 ó más dimensiones).

La adopción en Chile desde el año 2016 que inicia el Planbim para tener un estándar al 2020 y 2025 en el MINVU y MOP entre otras reparticiones públicas, también en las DOM, para el desarrollo y operación de proyectos de edificación e infraestructura pública.

La Industria de la Construcción cambia a un ritmo vertiginoso. La tecnología en construcción irrumpe de lleno movida por la necesidad de incrementar la productividad. Es en este cambio que se plantean las claves de esta nueva era, la automatización de los procesos constructivos y la robotización de la obra marcan el futuro de nuestra profesión.

Aunque la construcción por su naturaleza no es de las industrias que adoptan con rapidez el cambio, es indudable que, efectivamente, hay cambios sustantivos derivados de la tecnología e innovación, que buscan incrementar la productividad y lograr un producto final de mejor calidad, con menor costo y en menor tiempo.

Se está percibiendo un cambio en el sector de la construcción que arroja bastantes esperanzas, asomando un cambio que se vislumbra como definitivo y que está marcando la agenda de la evolución tecnológica en este campo.

Enfocándonos en la ejecución de obra, la necesidad de transformar el negocio de la construcción, que a día de hoy es altamente intensivo en mano de obra, está impulsando todas las tecnologías que buscan reducir los costes de mano de obra e incrementar la productividad.

Por esta razón se están adoptando de manera acelerada muchas tecnologías que hace unos años nos parecían ciencia ficción y que ahora podemos ver de manera habitual en nuestras obras: la robotización y la automatización de los procesos.