Mujer Construye

Dejó su natal Colombia para dedicarse a la cerrajería e inspirar a más mujeres en el rubro

Autor: Pavel Burton, publicado el

Natalia Rivera llegó en 2018 al país, comenzando una escalada de mucho sacrificio y ganas de superación. Hoy cuenta con su propia pyme de cerrajería y le llueven sus clientas.

Luego de vivir un tiempo en Brasil, trabajando como cerrajera, Natalia Rivera (32), cansada de la delincuencia y los asaltos, decidió dejar el país de la samba para explorar nuevos horizontes en Chile. Fue así como en 2018 decidió viajar a Santiago, donde vivía su hermano, quien durante ese tiempo esperaba a su primer hijo.

De esa manera, esta colombiana, oriunda de la ciudad de Pereira, se estableció en nuestro país donde continuó su carrera como cerrajera. Pero aquí en Chile se encontró con un panorama muy diferente, que implicaba nuevos desafíos en su rubro.

“Las chapas tanto en Colombia como en Brasil se asemejan mucho, pero cuando llegué a Chile me encontré con más de 10 modelos de chapas distintas, nunca lo había visto. Acá en Santiago tuve la fortuna de conocer las puertas blindadas, no sabía diferenciar una puerta de madera con una de seguridad, así que tuve que aprender mucho más”, asegura.

Luego de encontrarse con ese panorama, Natalia se capacitó e hizo cursos en la Universidad Andres Bello y en la Aiep. También participó de Tecfem, donde ganó más experiencia para desenvolverse en el rubro. Tras completar sus cursos, fue certificada como relatora, para ahora enseñar a otras mujeres interesadas en la cerrajería.

“Fue una experiencia maravillosa, nutrirme de conocimiento y poder compartirlo con otras personas, especialmente mujeres es algo super grato. Me encantaría seguir haciéndolo”, reconoce.

Viaja a todas las comunas

Natalia recibe llamadas de todas las comunas de la Región Metropolitana, e incluso, dependiendo del trabajo, se ha animado a viajar a Rancagua para solucionar una emergencia. Lo hace acompañado de su esposo, su compañero de trabajo y también cerrajero. Juntos se reparten la amplia clientela que han construido a lo largo de estos años en el país.

Ése éxito, aparte de la confianza y el buen trabajo que realiza, se debe al buen uso de redes sociales. Y es que ante el poco tiempo que maneja en el día, Natalia decidió pagarle a un publicista para que se hiciera cargo de sus redes. “Me gusta trabajar con él porque me entiende lo que quiero, me ha ayudado bastante. Es muy bueno en su trabajo”, indica.

En cuanto a sus proyecciones, Natalia sueña en grande. Sus metas son seguir creciendo con su emprendimiento de cerrajería, pero al mismo tiempo quiere compartir su pasión con más maestras.

“Yo quisiera tener un rubro de puras mujeres. Me encantaría tener un punto de encuentro que sea una oficina, donde además de salir a la calle a trabajar, asistan otras mujeres para aprender. Que formemos un equipo femenino de cerrajería. Ese es mi sueño. Alentar e inspirar a otras cerrajeras”, finaliza.

Si quieres contactar a Natalia, lo puedes hacer a través de su instagram (@super_llaves) o su número de Whatsapp: +56953892500.