Mujeres Maestras

Trabajó toda su vida en cocinerías: Hoy es la matriarca de los platos en la constru

Autor: Ivan Urbina, publicado el

Con 64 años de edad, María del Rosario Matamala conoció hace apenas seis meses lo que significa trabajar dentro de una obra de construcción. “Me gusta la tranquilidad y el ambiente”, aseguró. 

María del Rosario Matamala (64) trabajó toda su vida en el rubro gastronómico, tanto cocinando como asistiendo en cocinerías, restaurantes y casinos. Y en todo ese tiempo, nunca imaginó llegar a trabajar en el rubro de la construcción.

Hace seis meses que María trabaja dedicada 100% a la cocina, los comedores y los casilleros en la Obra Santa María del Peñón, a cargo de la Constructora Bricsa y ubicada en Puente Alto. A pesar de que nunca imaginó que terminaría trabajando rodeada de tantos hombres, ha sacado buenas cuentas durante este tiempo.

“La experiencia ha sido buena y mala, porque he tenido pequeños encuentros con algunos compañeros. Pero ha sido más bueno que malo, cada vez me adapto más. Yo jamás había trabajado en construcción, sino que siempre me dediqué al negocio de la comida en cocinerías y restaurantes”, relató Matamala a La Cuarta Constructor. 

¿Cómo llegó a la construcción, siendo que siempre se dedicó a otro rubro? “Yo vivo en los terrenos de la constructora, aquí cerquita, en Puente Alto. Tengo un amigo que es guardia de la constructora, que trabaja hace años con ellos, aunque me costaba estar bien convencida”, contó.

Sin embargo, poco a poco se fue acostumbrando al ambiente. Hoy en día se maneja en todos los aspectos de la cocina y el comedor de la faena.

“Lo que más me gusta de trabajar aquí es la tranquilidad y el ambiente que hay con los superiores. Si necesito algo, ellos están siempre pendientes, si me pasa algo ellos me dan todo el apoyo”, aseguró.

“Rodéense de gente que sepa más que ustedes”

María Matamala tiene dos hijos, cuatro nietos y una bisnieta. Aunque asintió que le gusta trabajar en una obra de construcción, decidió que se jubilará una vez termine la faena actual, o sea, en el 2024. 

“Si Dios quiere, terminaré junto con esta obra y no trabajaré más. Hay dos razones: una es que he tenido una vida trabajando, y la otra es que quiero tener más tiempo para estar con mis porotos chicos, disfrutarlos, salir, estar con ellos más cerca”, comentó. 

Al despedirnos, la luchadora mujer dio flor de consejos para aquellos jóvenes que están recién entrando al rubro de la construcción.

“Aquí tengo mucha afinidad con los niños jóvenes, porque a todos los veo como mis hijos. Lo único que podría decirles es que se culturicen, que no se queden ahí echados en los huevos. Siempre tienen que buscar el crecimiento, avanzar, aprender del mundo. Rodéense de gente que sepa más que ustedes”, finalizó.