Novedades del Rubro

Soldadura al arco de exportación: Electrodos chilenos reparan buques del comercio mundial

Autor: Ivan Urbina, publicado el

Renovación en certificación permitirá que los buques de cualquier procedencia puedan acceder rápidamente a un suministro de soldadura. 

A diferencia de lo que pasaba hace algunos meses, ahora los electrodos chilenos podrán ser utilizados en buques de cualquier procedencia. Esto gracias a una renovación en la certificación por parte de la empresa chilena Air Products Indura. 

Fernando Faría, jefe de área de desarrollo de soldadura de Indura, explicó que las embarcaciones internacionales solo pueden utilizar elementos certificados. Si esto no ocurre, los buques deben buscar un nuevo astillero en caso de que el desperfecto no impida su tránsito, o, ante problemas mayores, esperar repuestos desde el propio país o incluso el extranjero.

“Los astilleros necesitan que el producto cumpla con requerimientos técnicos y de calidad para ser utilizado en los buques. A nivel de mercado, muy pocos de los electrodos que se importan tienen este tipo de certificación”, dijo este ingeniero metalúrgico que lidera los laboratorios químicos y mecánicos de la compañía nacional.

Un electrodo es, básicamente, la varilla metálica que posee un revestimiento que se utiliza para soldar, en el caso de los buques, el procedimiento común es el de la soldadura al arco. Faría explica que en términos técnicos se define como un “consumible” que al fundirse sirve de pegamento para unir metales.

Cada país tiene su propio estándar, pero los productos fabricados por Indura en su planta de Cerrillos están validados bajo protocolos internacionales. “Si el buque es japonés, el producto tiene que tener la certificación para poder soldarse en embarcaciones de esta procedencia. Si es inglés, lo mismo. En Chile existen cuatro casas navales y estos electrodos están certificados para ser utilizados en todas ellas”, precisó Faría.

En total, son siete los tipos de electrodos certificados desde el área de desarrollado por la marca nacional. Todos ellos aprobados bajo la norma internacional DNV, ABS, LR y NK

Gracias a sus características físicas y mecánicas, su aplicación hace posible la fusión de dos materiales metálicos, para conformar una sola estructura. La principal característica de esta pieza es que está revestida, es decir, tiene un núcleo metálico y otros materiales como polvos de hierro o celulosa en su exterior, con aplicaciones en distintas industrias, pero ideales para astilleros.

Reparando el “alma” del comercio mundial

Los contenedores marítimos trasladan el 80% del comercio global, recorriendo los océanos con gran parte de las mercancías de la cadena de suministro mundial. El volumen total de carga aumentó cinco veces en 50 años, pasando de los 2.600 millones de toneladas de 1970, a las 11 mil millones de toneladas en 2019.

“La detención de un tipo de estas estructuras de tránsito marino implica muchísimo dinero. Si disponemos localmente de materiales certificados, los procesos de reparación se van a agilizar. Estamos agregando valor con un producto fabricado en Chile, con materiales en su mayoría nacionales, y que viene a  resolver una tarea crítica del comercio marítimo”, comentó Fernando Faría de Indura.

Se estima, además, que los buques comerciales son cuatro veces más grandes hoy que a comienzos de siglo. De acuerdo a la Organización Mundial del Comercio, actualmente hay más de 50 mil buques mercantes transportando todo tipo de carga. La flota mundial se ha registrado en más de 150 países y está tripulada por más de un millón de profesionales de casi todas las nacionalidades.