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Fundador de Inmobiliaria Fundamenta: “Es muy grave la paralización del proyecto Egaña”
Autor: Constructor, publicado el
Pablo Medina, uno de los creadores de la empresa a cargo del proyecto estancado en Ñuñoa, señaló que “esto no es solamente un daño para las inmobiliarias, sino que también para el país”.
Gran polémica y preocupación ha causado la paralización del megaproyecto de construcción “Egaña Comunidad Sustentable” en la comuna de Ñuñoa. El rechazo de parte de la Comisión de Evaluación Ambiental de la Región Metropolitana provocó que más de 400 trabajadores protestaran con la incertidumbre de un posible despido masivo.
Diversas reacciones ha causado este caso. La Municipalidad de Ñuñoa, por ejemplo, señaló que no tiene las facultades para reactivar el proyecto. Mejorando sus estándares, eso sería responsabilidad de la inmobiliaria.
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Pablo Medina, fundador de la Inmobiliaria Fundamenta, conversó con Diario Financiero, demostrando su preocupación por esta situación, tanto para ellos como para los trabajadores.
“Es muy grave la paralización del proyecto Egaña. Hay trabajando más de mil personas, o sea más de mil familias, gente que quiere mantener su lugar de trabajo durante 5 años. En su momento peak, este proyecto va a demandar 2 mil trabajadores. Eso es dramático para una situación de desempleo, para un país que necesita crecer e invertir”, manifestó Medina.
“Si nosotros estamos construyendo hace tres años este proyecto, y de repente en una tarde se deja sin efecto un trámite esencial como es la declaración de impuestos ambiental, se trata de una pésima señal para cualquier inversionista que quiera invertir en cualquier sector de la industria, no solamente en la inmobiliaria”, agregó el empresario.
Combatir el déficit de vivienda
El gestor de la inmobiliaria apuntó a pensar en combatir el déficit inmobiliario e integrar socialmente a trabajadores a viviendas cerca de la ciudad y de sus lugares de trabajo.
“También es contradictorio respecto a la integración social. Este proyecto tenía más de 500 departamentos vendidos, hay un déficit de vivienda. La gente de menos recursos quiere vivir en comunas que tienen mejores servicios”, explicó Medina.
“Necesitamos que la gente se vaya a vivir dentro de ciudad y se mezclen diferentes actores de la sociedad y no excluirlos a que vivan en la periferia en casas a dos horas de sus lugares de trabajo (…) Esto no es solamente un daño para las inmobiliarias y para los trabajadores, sino que es un daño para el país, porque las señales que se están dando son muy malas”, cerró.