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Elija la bencina con el octanaje adecuado: El motor de su vehículo lo agradecerá

Autor: Constructor, publicado el

Utilizar una gasolina que no tenga la calidad suficiente para su automóvil puede perjudicar el rendimiento del motor, originando formación de suciedades. La clave es siempre preguntar sobre qué octanaje ocupa ese vehículo en específico.

De por sí, los maestros independientes suelen movilizarse a través de un vehículo propio para trasladarse junto a sus harramientas más importantes hacia su destino de trabajo.

Además, la pasión por la construcción va de la mano, en muchas ocasiones, con un gusto por la mecánica automotriz.

Entonces, maestro, debe saber que el octanaje de la bencina es un tema importante a tratar si es que usted posee su automóvil personal, y que una bencina con 93 octanos no es igual a la de 97. Más aún si el vehículo es adquirido de segunda mano.

“El secreto está en el uso de la gasolina. Las personas deben saber que no da lo mismo qué gasolina le cargan al vehículo: existen corrientes y de baja calidad que afectan el rendimiento del motor y originan formación de suciedades. Obviamente, no es una grata experiencia conducir un auto en esas condiciones”, aseguró el gerente de ventas de Shell, Andrés Dinamarca.

Lo que hay que tener en cuenta al comprar un vehículo usado es que cada modelo tiene una bencina con un octanaje recomendable. Por eso, la sugerencia es siempre preguntar al fabricante o al vendedor cuál octanaje debe ocupar su joyita.

“Se debe considerar el octanaje que se elegirá para rellenar el tanque de gasolina, ya que la relación precio v/s calidad siempre nos hará preferir entre 95 o 97 octanos. La única regla debe ser proteger el motor del automóvil e impedir que los depósitos de carbono en las válvulas perjudiquen cualquiera de nuestros viajes”, indicó Dinamarca.

El concepto de octanaje se refiere a la capacidad de resistencia que tiene la gasolina a la detonación durante el proceso de compresión que ocurre al interior de los cilindros de los motores.

Cabe mencionar que todas las gasolinas poseen la misma base, pero son los aditivos los que determinan el valor agregado.

En ese sentido, la tecnología y la innovación han permitido la entrada de los denominados combustibles ‘premium’ a los distintos mercados.